La Ley General de Personas con Discapacidad marca para este 2017 el límite de adaptación de los medios de transporte. Es por ello que Renfe no tiene excusa para volver a retrasar el proceso de adecuación de los Talgo VI para el uso de las personas con movilidad reducida en Almería. Lo ha prometido para el verano y la Mesa del Ferrocarril volvió a salir ayer a la calle para recordárselo. Ya, de todas formas, la provincia será la última en sumarse a este derecho.

Los colectivos implicados creen que se están vulnerando sus derechos fundamentales. Pero van más lejos. Evidentemente, se les coarta su libertad para desplazarse -independientemente del motivo- y apuntan que la provincia está perdiendo oportunidades. Otra más. En este caso la del turismo accesible. "Están frenando el posible desarrollo que procede del turismo accesible. Hay miles de personas que podrían venir de vacaciones a Almería y no lo pueden hacer", manifiesta Valentín Sola, presidente de la Federación Almeriense de Asociaciones de Personas con Discapacidad (FAAM). Sola insiste en que la llegada del verano es "inminente", con lo que espera que la puesta en funcionamiento de vagones adaptados se cumpla acorde con las últimas previsiones, dado que "los billetes de avión son carísimos" y "no todos los autobuses son accesibles" para poder viajar. "No es una gran inversión, no estamos hablando de mucho dinero. Esto se podría haber hecho hace muchísimo tiempo y no se ha realizado".

Convocados por la Mesa, decenas de personas con movilidad reducida concentraron frente a la antigua estación de ferrocarril de Almería para reclamar a Renfe su compromiso con la adaptación de vagones que permitan a los usuarios que viajan en silla de ruedas poder realizar un viaje "digno".

"Nos manifestamos para poder viajar decentemente en el tren. Hay personal que te ayuda a subir, pero no hay nada adaptado. Ni hay anclajes ni lo está el baño. Las personas con discapacidad estamos marginadas, no podemos salir de Almería", explica María José romero, vicepresidenta de la Asociación de Mujeres con Discapacidad Luna, encargada de leer el manifiesto elaborado para la concentración.

Frente a una pancarta con el lema 'Quiero viajar en tren con mi silla de ruedas', también compareció el coordinador de la Mesa en Defensa del Ferrocarril, José Carlos Tejada, quien lamenta que el tren "inclusivo" llegue "tarde" para Almería, máxime cuando "nunca" ha existido adaptación de asientos para las personas con movilidad reducida. "Renfe no va a tener ningún trato de favor con esta tierra porque se va a ir al plazo máximo que le obliga el plan de adaptabilidad de todos sus trenes de cercanías, media distancia y larga distancia", explica.

"Reivindicamos que todos los convoyes incorporen vagón accesible con silla de ruedas y al menos con dos plazas para personas con movilidad reducida. Que dispongan de un lavabo adaptado. Y que estas reformas se hagan con la máxima celeridad", explica Jesús Moreno, quien participó en la lectura del manifiesto.

De la misma forma, José Francisco Montoya, requirió que se garantice "la accesibilidad a la compra de billetes y tengan apoyo iconográfico para aquellos pasajeros que tengan dificultad de lectura y de voz para personas con discapacidad visual. Pedimos que todas las estaciones dispongan de guías para personas con discapacidad visual y/o cognitiva".

Esta es la tercera ocasión en la que la Mesa del Ferrocarril se concentra para pedir trenes accesibles para las personas con movilidad reducida. Fueron en torno a 200 las personas que se manifestaron en las inmediaciones de la antigua estación de ferrocarril de la capital almeriense.