El presidente del grupo almeriense Citymar, Miguel Rifá, tiene previsto presentar, en los próximos días, una querella como acusación particular, cuyo contenido se encuentra estudiando y ultimando con sus abogados, según ha podido conocer Diario de Almería de fuentes cercanas a la compañía.

Rifá considera, y así lo trasladará a la justicia, que ha sido víctima de un engaño y una estafa por parte del presidente de Marvel Hotels, Josep Maria Morros Llauradó, detenido este martes, después de que ambas compañías sellaron el acuerdo para su integración, en enero de 2013, bajo la firma comercial Vita Hoteliers.

Posteriormente, con el paso de los primeros meses, comenzaron a visualizarse los problemas, entre ellos, los más graves, la falta de mantenimiento de las instalaciones y los impagos a proveedores y a numerosos trabajadores del nuevo grupo. Entre ellos, muchos afectados en Almería, donde uno de los buques insignia del turismo almeriense, el Gran Hotel, no se ha quedado al margen y ha padecido los efectos de esta situación. Sin ir más lejos, el pasado lunes cortaban la luz en el Gran Hotel, además de que son muchos los trabajadores que tienen hasta siete nóminas sin cobrar en la provincia.

El objetivo de Miguel Rifá pasa ahora por recuperar los establecimientos hoteleros que forman parte de Vita Hoteliers, un total de quince, de los que siete, Gran Hotel incluido, se encuentran en la provincia de Almería. A partir de ahí, el siguiente paso es recuperar la confianza de los proveedores, clientes y empleados, bajo una nueva marca comercial que proyecte de nuevo solvencia.