Una persona tranquila, de perfil bajo, que dicen los entendidos. Poco dado a la política de salir en la foto y muy acostumbrado a trabajar duro, de forma incansable. Así es José Cano García, el más que seguro futuro presidente de la Confederación Empresarial de la Provincia de Almería, Asempal, pues la Asamblea General Ordinaria que se celebrará este martes cuenta únicamente con su candidatura.

Este veratense de 54 años posee una trayectoria profesional a la espalda dedicada, prácticamente por entero, a Deretil, empresa farmacéutica de referencia en la provincia, auténtica despensa de Europa de amoxicilina y de cadenas laterales para infinidad de aplicaciones, cuyo capital es 100% español desde noviembre de 2008.

Fue entonces cuando se demostró una de las características más destacadas de José Cano, su espíritu emprendedor, pues junto a otros directivos de la compañía, se liaron la manta a la cabeza para comprar el capital que se encontraba en manos de la holandesa DSM para operar no sólo bajo el sello 'made in Spain' (Villaricos, para más señas), sino también bajo sede española.

Licenciado en Ingeniería Superior Industrial, en la Especialidad de Mecánica, Cano atesora cierta experiencia en cargos institucionales. No en vano ha sido presidente de la Comisión de Industria y Medio Ambiente de la Cámara de Comercio de Almería y miembro-vocal del Pleno de la misma, puesto que desempeña también en la actualidad. También ha ocupado la presidencia de la Asociación de Empresarios de Energías Renovables de Almería de Asempal, pues sus inquitudes en materia de energías verdes no son un hobby, ni mucho menos. Defensor del desarrollo sostenible y del equilibrio entre el auge económico y el respeto al medio ambiente, trabaja desde dentro del sector y es accionistas de Biocarsa SA, sociedad impulsada por su primo José Cano Requena, dedicada a la elaboración y distribución de biocombustibles, con sede en Cuevas del Almanzora.

En 2013 cumplirá nada menos que 30 años trabajando en Deretil. "Ha sido una trayectoria muy enriquecedora: sin cambiar de lugar me ha permitido trabajar en distintas empresas, porque cuando entré era una empresa familiar, después pasó a una multinacional holandesa y por último vuelve a ser una empresa de capital español. El hecho de estar muy internacionalizada me ha permitido además conocer distintas culturas, diferentes métodos de gestión y la experiencia de trabajar en el extranjero. Además he trabajado en diversos niveles de responsabilidad, iniciando mi actividad como ingeniero becario y llegando al final a desempeñar distintas responsabilidades en el ámbito internacional".

Siempre ha sabido lo que quería hacer en la vida: "La verdad es que siempre he tenido claro que quería ser ingeniero y ejercer la actividad de la ingeniería y la gestion que es lo que he hecho la mayor parte del tiempo en mi empresa y hubiera hecho en otra, si se hubiera dado el caso. No me he planteado nunca ninguna otra posibilidad. Antes de la vida universitaria mi padre me preguntaba por otras opciones, como militar, y yo siempre le respondía lo mismo: que quería ser ingeniero". No sólo lo ha conseguido, sino que, además, ha sabido combinarlo con la gestión empresarial.