Llegó el momento de cambiar el chip. Después de perder dos encuentros consecutivos ante dos equipos que luchan por el ascenso de categoría, como son Cartagena (2-0) y Marbella (0-1), el Club Deportivo El Ejido afronta ahora tres encuentros de vital importancia para su futuro en esta categoría. A los celestes les toca verse las caras con rivales de su liga, oponentes que pelean por la permanencia y ante los que no se pueden permitir tropezar. En este tramo sí que una victoria puede tener valor doble para el que la logre, ya que además de tres puntos se logría tener cierta ventaja sobre el derrotado, y siempre dependiendo del resultado, en un supuesto empate a puntos en la tabla clasificatoria.

Las sufridas ante cartageneros, que son los líderes, y frente a los malagueños, terceros, sin duda son derrotas previsibles para un recién ascendido como el conjunto ejidense, cuyas aspiraciones son muy distintas a la de dichos rivales. No obstante, siempre hay lugar para la sorpresa. De hecho, el domingo frente a los de Nafti, los almerienses demostraron que tienen capacidad suficiente como para poner en aprietos a un gallito de la categoría, aunque la falta de acierto les privó de sacar premio en un duelo en el que los foráneos, con muy poco, se llevaron mucho.

Pero de nada sirven las excusas, los maquillajes o las teorías de qué hubiese pasado si se hubiese tenido más atino, porque la realidad es que la situación del cuadro de Alberto González es delicada y lo pasado, pasado está. Hay que centrarse en lo que viene. Cero puntos en dos semanas y regresar a los puestos de descenso hace que sea obligatorio para los del Poniente empezar a sumar de tres en tres. Más aún teniendo en cuenta que Real Jaén, Sanluqueño y Extremadura, que también se juegan la salvación, serán las próximas citas. Duelos a vida o muerte, como se suele decir, para los celestes. Si las cosas saliesen bien y la mejoría del equipo se empezara a ver reflejada en los resultados, el CD El Ejido podría salir reforzado de estos choques directos y encarar luego el Tourmalet en el que se topará con Villanovense, Jumilla y Linense, que se juegan mucho.