Épica. La diosa fortuna quiso echarle un capote al Adra y Miguel le dio los tres puntos a un luchador equipo abderitano. El Vera, que fue uno de los mejores equipo que ha visitado Miramar, pagó muy caro las ocasiones falladas cuando tenía el partido de cara. Pero comencemos por el principio. Butra salió con una velocidad distinta al resto de jugadores. El delantero almeriense, a los cinco minutos, iba a poner a los locales por delante en el marcador. Cuando la gente todavía no se había sentado, los de Miguel Compán estaban ya cantando el primer tanto. Pero el Vera no se deshizo y se iba a hacer con el control del centro del campo. Floro Garrido arengó a sus jugadores que, con un Chupe haciendo diabluras entre la defensa abderitana, le iba a dar la vuelta en el marcador. Fue el propio delantero centro veratense el que hizo el tanto del empate. El descanso animó más aún al Vera, que se iba a adelantar a los nueve minutos de la reanudación gracias a Juanma. Pero la comunión entre Miramar y sus jugadores es mágica. El público rojillo aupó a los suyos y sacaron fuerzas de flaqueza. Miguel empataría el encuentro a falta de media hora. A partir de ahí, ocasiones para los dos bandos. Un punto ya se daba por bueno para Adra y Vera, pero Miguel fue, en el minuto 93, el más pícaro.