Mireia Belmonte logró la medalla de oro en los 200 mariposa (2.05,26), con lo que completa su particular triple corona, ya que anteriormente había conseguido el oro olímpico y europeo.

Además, es la cuarta del equipo español en el Mundial tras la plata conseguida por ella misma en el 1.500 y las dos de plata de Ona Carbonell en sincronizada. A este metal hay que añadir la del equipo femenino de waterpolo, que será hoy de oro o de plata.

Se trata de la quinta medalla de la española en unos Mundiales. En el podio la acompañaron la alemana Franziska Hentke (2.05,26) y la húngara Katinka Hosszú (2.06,02).

Belmonte venció en una final con suspense, ya que tuvo que alargar la última brazada debido a la proximidad de la alemana, que se quedó a 13 centésimas de la badalonesa. El bronce fue para nadadora local Hosszú, ante la locura de los aficionados magiares que volvieron a llenar las gradas del Duna Aréna.

La española Conservó en el primer cien y lo dio todo en el segundo. Pasó el primer 50 sexta con 28,61, 41 centésimas por encima de An Senyeon.

La española ya dominaba la prueba en el 150, parecía que su victoria iba a ser cómoda, pero entonces apareció Hentke, que tiene la mejor marca mundial del año y que le puso las cosas muy complicadas a Belmonte.

Al final la española volvió a llevarse la medalla de oro, como el verano pasado en Río, con mejor marca mundial del año incluida (2.05,26).

La de ayer es la quinta de Belmonte en unos Mundiales. Hasta ahora había logrado tres platas (200 mariposa y 400 estilos en Barcelona 2013; 1.500 en Budapest 2017) y un bronce (200 estilos), convirtiéndose en el nadador español con más medallas.

Belmonte señaló después de su oro mundialista que estaba "muy emocionada y contenta" por haberse colgado un metal preciado. "Era la medalla que me faltaba", afirmó la badalonesa, que anteriormente había subido a lo más alto del podio en unos Juegos y en unos Europeos.