Francisco José Martínez Molina es, a sus 33 años, director comercial de la compañía Hermasa. A este macaelense, su dedicación al sector de la piedra natural le viene de familia. "A edad muy temprana ya visitaba la fábrica y la cantera con mi padre. Pienso que la mayoría de las empresas de la zona, los hijos han vivido desde muy pequeños esta dedicación al sector de la piedra natural. Prueba de ello, es que muchos trabajamos con nuestros padres en el negocio y la mayoría son familiares. En la actualidad, yo soy la tercera generación", expone Martínez.

De su infancia recuerda acompañar, muy a menudo, a su padre a visitar la fábrica. "Me gustaba preguntarle el trabajo de cada operario en la fábrica y disfrutaba con las explicaciones que él me daba. Mi padre lleva toda la vida trabajando en esto, es un gran conocedor del sector y entiende bastante".

Respecto a sus visitas a las canteras cuando era pequeño señala que también le gustaba ir con su padre, "sobre todo porque solía subirme a las máquinas de gran tonelaje.... y disfrutaba viendo las masas de mármol a pie de cantera".

El director comercial de Hermasa, apasionado del mundo del motor y que tiene las motos entre sus mayores aficiones sobre todo en invierno, comenzaba a trabajar a los 18 años en el sector de la piedra natural, siguiendo los pasos de su abuelo y de su padre. "Mi intención siempre ha sido aprender todas las fases de la piedra, desde la extracción, el transporte, la elaboración y, por supuesto, la comercialización. Estoy convencido que para dirigir una empresa uno debe saber de primera mano cómo se gestiona y cómo se trabaja en cada una de sus fases", señala.

Además de trabajar, Martínez ha compaginado su carrera profesional con la formación, realizando cursos que, en su mayoría, están relacionados con el mundo empresarial. "Por citar algunos de ellos, he realizado estudios de medio ambiente, así como de riesgos laborales e inglés; todos ellos los considero fundamentales para el desarrollo de nuestra actividad".

Hermasa fue una de las empresas emprendedoras del sector de la piedra natural en la comarca con la adquisición de dos canteras hace más de 50 años. En este sentido, el director comercial de la empresa narra que fue su abuelo quien compró su primera cantera en los años 50 y, "a lo largo de nuestra vida empresarial se han ido adquiriendo y vendiendo algunas más".

En la actualidad la empresa dispone de cuatro canteras de Blanco Macael. "También tenemos otras canteras de crema y mármol verde con distintas sociedades".

Martínez detalla que el sector de la piedra ha ido evolucionando con el paso del tiempo, pero en el fondo sigue siendo el mismo a pesar de las nuevas tecnologías y la mecanización de los trabajos, y en la fábrica cada vez se tiene más en cuenta la especialización. "A día de hoy Hermasa trabaja en algunos mercados internacionales e intentamos siempre vender los mármoles de Macael, en especial el blanco".

Aunque no corren buenos tiempos para el sector, en parte, por su dependencia de la construcción, Martínez insiste en que la calidad del Blanco Macael es algo que está más que probada. "En este sentido Hermasa cree y apuesta por su utilización en grandes proyectos futuros y esto conllevará a que las empresas puedan ir recuperando su estabilidad poco a poco".