La comarca de Níjar respira olores cofrades con el programa de actos religiosos que ha preparado la colaboración entre el Ayuntamiento y las Hermandades. La celebración de la Semana Santa de Níjar 2024 está presente en nueve enclaves vecinales- Campohermoso; San Isidro; Atochares; Ruescas; Fernán Pérez; Las Negras, Barranquete, Los Nietos y Nijar Villa-, pero es esta pedanía donde se centraliza y le da rango de oficialidad .La lectura del Pregón de la Semana Santa 2024 ha corrido a cargo de David Brando, muy vinculado a la Semana Santa almeriense como costalero de la Hermandad de la Macarena, en el paso del Cristo del Señor, y capataz de la Hermandad del Santísimo en la edición de 2022 -en la 2020 y 2021 no hubo por la pandemia- cuando se recuperaron la figura del costalero.

La Semana Santa arranca en la Villa de Níjar el Viernes de Dolores con el tradicional concierto de marchas procesionales de la Banda de Música de la Asociación Cultural de Níjar. En Campohermoso, se recrea la última cena de Jesucristo o la representación del Vía Crucis del Cristo Crucificado del Viernes Santo y la procesión del Encuentro de Jesús Resucitado y Nuestra Señora de la Luz del Domingo de Resurrección. La Pasión llega a Fernán Pérez y su procesión del Rosario Virgen de los Dolores; San Isidro y su procesión del Viernes Santo con la imagen del Cristo Crucificado y Muerto en la Cruz; Los Nietos y su procesión de Nuestro Padre Cautivo, del Martes Santo, o el Vía Crucis de Barranquete del Miércoles Santo.

La agenda de esta misma fecha presenta la procesión de la imagen de Jesús en la Oración del Huerto con la Agrupación Infantil de porteadores de la Hermandad de Santa María y la Banda Juvenil de la Escuela Municipal de Música, en la Villa de Nijar. La del Jueves Santo ofrecerá la procesión del Padre Jesús Nazareno y la Santísima Virgen de los Dolores en la Villa y santos oficios en la cena del Señor en Campohermoso, San Isidro, Fernán Pérez y Las Negras, donde se inaugurará el Monumento.

El Viernes Santo se anuncia procesión del Santo Entierro y la Santísima Virgen de los Dolores en la Villa, via crucis procesional en Campohermoso, Atochares, San Isidro, Fernán Pérez, las Negras y procesión en Ruescas y el Sábado Santo (30 de marzo) se celebrará la del Encuentro de Jesús Resucitado y su Santísima Madre en la Villa y vigilia pascual en Campohermoso y San Isidro. La Semana Santa 2024 se cerrará el Domingo de Resurrección con procesión en Campohermoso y santas misas en la Villa, Atochares, Barranquete, San Isidro, Fernán Pérez y Las Negras,

El cartel anunciador tiene por protagonista la Virgen Dolorosa, de la Villa de Níjar. Su diseño es obra de Mariano Carmona y la imagen es de David Luque. Se trata de “una estética minimalista con un fuerte impacto visual, y el fondo del cartel muestra una imagen difuminada de la Villa de Níjar” valoran.

La Semana Santa en la Villa de Níjar, capital administrativa al albergar la Casa Consistorial, es “ solemne, sobria y religiosa”, según la documentada opinión de José Rodríguez Bonilla, quien ejerce como su cura-párroco desde agosto de 2014. “Hay mucho respeto por las imágenes y conciencia por parte de las Hermandades”, añade. Con 22 barriadas o pedanías, la Pasión “se cuela en las casas y se vive en las calles, sin gran ceremoniosidad y más austeridad, pero con la misma fe y devoción que en otros de más pompa y boato” valora este joven sacerdote , uno de los nueve a quienes el Obispo de Almería, Antonio Gómez Cantero, ha nombrado Arciprestes para los Arciprestazgos de la Diócesis.

‘La Mudá’ es una de las peculiaridades de la Semana Santa nijareña, una singularidad de esta celebración que está fuera del foco mediático y defiende más una Pasión propia y sencilla, pero sin caer en el simplismo.Se trata de una tradición local, muy arraigada y centenaria. Su organización corre a cargo de la Hermandad del Santísimo Corazón de Jesús. Tiene lugar entre el sábado y Domingo de Ramos y consiste en el traslado del Corazón de Jesús a una casa particular de una vecina del barrio de Las Eras. “Los fieles se turnan para velarlo, siguiendo una tradición centenaria que rememora la toma total del barrio de Las Eras por parte de los cristianos y la expulsión de los árabes” explica José Bonilla, sacerdote de la Villa de Níjar.