Con la entrega del bastón de mando y un abrazo sincero, José Céspedes ha recibido de su antecesor, Carmelo Rodríguez, la misión de ser el rector de la Universidad de Almería durante los próximos seis años con el objetivo de hacer que la institución continúe creciendo y alcanzando nuevas metas.

El Paraninfo de la universidad ha sido el escenario del solemne acto de investidura del nuevo rector, José Joaquín Céspedes Lorente, según marca el protocolo universitario. Cientos de personas de la comunidad educativa, política, social y empresarial lo han acompañado en este día tan especial para la institución, entre ellos el consejero de Universidad, Investigación e Innovación, José Carlos Gómez Villamandos. Si bien, el nuevo mandatario de la UAL lleva ya ejerciendo como tal unos meses y el 12 de enero tomó posesión del cargo en el palacio de San Telmo, en Sevilla.

Desfile de los doctores de la UAL.

José Céspedes asegura que ser rector es "un honor y un orgullo que llevan emparejados una altísima responsabilidad". Para hacer frente a esto promete poner todo su esfuerzo y compromiso, si bien, sobre la base de que "los grandes logros se consiguen cuando todas las personas se implican, con grandes objetivos y grandes valores".

Se apoya para ello en "un gran equipo de gobierno con gran solvencia académica y profesional, con una gran calidad humana y unos perfiles heterogéneos pero complementarios". Asimismo, señala que es imprescindible que el conjunto de la comunidad se comprometa con el buen funcionamiento de la universidad y se implique "en elevar aún más su relevancia, su prestigio y su utilidad". Y es que tiene claro que la participación de todos es necesaria porque "no se trata de avanzar solos más rápido, sino de llegar juntos mucho más lejos".

Durante su discurso, Céspedes habló de la universidad del futuro, que deberá ofrecer a los estudiantes y la sociedad en su conjunto las respuestas necesarias a los nuevos desafíos y transformaciones tecnológicas, económicas y sociales que plantea la realidad. Y debe hacerlo, además, con las máximas garantías "para que nadie se quede en el camino", según destaca el rector.  

Foto de familia en el edifico del Rectorado de la UAL.

Para el nuevo dirigente de la UAL, la universidad almeriense parte "de una situación envidiable", pues en apenas 30 años de existencia "ha logrado consolidarse como una institución de enseñanza superior referente en muchos aspectos". Y no son palabras que partan de un mero sentimiento de orgullo, sino que el rector argumenta que son los datos y los reconocimientos nacionales e internacionales los que lo refrendan. 

José Céspedes destacó los pilares en los que se sustentará su acción de gobierno, con la docencia y los estudiantes en la posición más relevante, pues "la universidad no existiría sin ellos". En este sentido, informa que se está trabajando en la implementación de un mapa de grados y posgrados con nuevas titulaciones, adaptado al entorno y a los cambios que están teniendo lugar. Incluirá "el desarrollo de habilidades, contenidos y metodologías innovadoras que hagan a los estudiantes protagonistas de su propio proceso de aprendizaje y que los prepare para la empleabilidad en un entorno laboral en transformación".

También en el ámbito de la docencia, el rector aboga por promover una formación permanente de los egresados y profesionales a lo largo de toda la vida, con la incorporación de microcredenciales.

Otro de los pilares es la investigación, que para el nuevo rector debe ir de la mano de la formación "para avanzar hacia la innovación y la consecución de resultados de investigación que constituyan la base para el avance del conocimiento y que resuelvan los retos actuales y futuros". Para ello, se compromete a apoyar a los investigadores en la consecución de financiación para sus proyectos.

En otro orden de cosas, el rector también pone en relieve la actividad cultural de la UAL, que define como "una línea estratégica transversal de nuestra acción de gobierno" y que se ha convertido en una seña de identidad de la universidad, no solo para la comunidad universitaria, sino con toda la sociedad almeriense en su conjunto.

Por último, en lo que se refiere a la transferencia e intercambio de conocimiento con la sociedad, el rector reiteró su apuesta por fortalecer la conexión con el tejido productivo, industrial y empresarial para crear espacios de innovación para proyectos formativos y de investigación. Además, en ese intercambio de conocimiento incluye a las instituciones públicas, económicas y sociales, para "su aplicación en le diseño de políticas en temas como la reducción de la pobreza y las desigualdades, la inclusión, la lucha contra el cambio climático o atender el problema del despoblamiento".

No faltaron también referencias a la internacionalización de la UAL, en la que el nuevo rector quiere dedicar grandes esfuerzos para "atraer talento internacional”. También habló de la transformación digital del campus, que “va a representar otro de los grandes pilares de esta etapa”, los valores, con el “propósito de que ninguno de nuestros estudiantes abandone por motivos económicos esta institución”, la vida universitaria saludable y activa, “señas de identidad de la vida en un campus dinámico y abierto”, que “se aproxime aún más a la ciudad y a la provincia, compartiendo espacios, edificios e instalaciones que faciliten la colaboración y el intercambio de conocimientos”. Además ha formulado el “compromiso ético” de su equipo antes de realizar la petición de “colaboración” en “esa carrera de fondo” a todos los agentes presentes, definiendo a la UAL como “una empresa colectiva” y como “un proyecto dinámico en continua evolución”.

Tras una gran ovación por parte de todos los presentes en el solemne acto, el nuevo rector dio orden a los doctores de levantarse y cubrirse y la interpretación de ‘Gaudeamus Igitur’ por parte de la coral universitaria puso el broche de oro a la investidura de José Joaquín Céspedes Lorente como rector de la UAL hasta el año 2029.

Apoyo del antiguo rector y del consejero de Universidad

Durante el solemne acto tomaron la palabra también en rector saliente, Carmelo Rodríguez, y el consejero de Universidad, Investigación e Innovación, José Carlos Gómez Villamandos. 

El exrector habló de la apertura de una nueva etapa y de un momento "de ilusión y novedades" pero también de “nostalgia” en su despedida. Expresó sus “buenos deseos” para este mandato que inicia José Céspedes y agradeció “con mayúsculas” a la comunidad universitaria los ocho años en los que, como admite, “ha sido todo un privilegio pilotar esta nave”.

El rector saliente dijo haber intentado en todo momento “realizar una gestión lo más eficiente y responsable posible basada en los principios de transparencia, responsabilidad institucional, gobernanza comprometida y ética, y autonomía universitaria”.

Asimismo, aprovechó la ocasión para pedir “respaldo y compromiso” a “las instituciones y entidades públicas y privadas de la sociedad almeriense, y los gobiernos regional y nacional” par a el nuevo rector. A Céspedes le ha recordado “retos heredados”, como la adaptación a la LOSU, UNIGREEN y financiación, expresándole su confianza: “Aúnas cualidades profesionales y humanas extraordinarias”.

El consejero de Universidad, Investigación e Innovación, José Carlos Gómez Villamandos, ha puesto de manifiesto la trayectoria investigadora desplegada por la UAL, con una participación relevante en áreas como la sequía, el cambio climático o la agricultura. En su discurso ha querido poner de relieve el esfuerzo realizado por esta institución en la confección de sus propuestas para la nueva programación académica, destacando su elevada especialización en áreas del conocimiento fundamentales como las TIC o la salud y su apuesta por la formación interuniversitaria e internacional. Esa orientación dada a sus futuras titulaciones “contribuirá a reforzar los vínculos y la cooperación entre campus, en línea con lo marcado desde el Gobierno andaluz”, ha incidido. Además, ha felicitado a la universidad almeriense por su iniciativa de analizar qué planes de estudio deben actualizarse.